March 23, 2022

Subastas de energía: Cómo funcionan y su sistema marginalista

Hace poco tiempo, ya hablamos sobre OMIE y el funcionamiento del mercado mayorista eléctrico. No obstante, no ahondamos en el proceso de fijación de precios de la electricidad. Pero no te preocupes, hoy es el día. En la entrada de hoy, te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre las subastas de la energía diaria, así como de su sistema marginalista.

La verdad, nos encontramos en un momento muy delicado en el sector energético. La semana pasada, superamos la barrera de los 200€ el MWh, otro récord histórico. Sin duda, una cifra impensable meses atrás. Sin embargo, ¿Qué energías entran dentro de las subastas de energía diaria? ¿Cómo se establece el precio para cada una de ellas? Si quieres saber un poco más sobre este tema, no dudes en seguir leyendo. Estamos ante un problema muy importante. 

¿Cómo funcionan las subastas de energía en España?

Para refrescar la memoria, vamos a darte unas pequeñas pinceladas de cómo se fija el precio de la energía cada día. Conocer este procedimiento es importante, pues la entrada de hoy está directamente relacionada con ello. Atento y no pierdas ningún detalle.

  1. Los generadores de la energía y sus compradores se reúnen en una especie de subasta e indican el precio por el que van a comprar y vender la energía de cada hora del día.
  2. Se realiza una gráfica de dos ejes (compra y venta) y se plasman todas las ofertas. El punto donde se encuentren ambos ejes, será el precio por el que se fijará la energía a esa hora. Ese punto de encuentro se llamará punto de casación.
  3. A partir de ahí, el precio podrá variar mínimamente en función de algún imprevisto. No obstante, el precio será muy parecido al pactado en las subastas de energía.

¿Qué materias primas y tecnologías entran diariamente en las subastas de energía?

Una de las ventajas que tiene nuestro país es la alternativa de materias primas que se comercializa cada día. Por norma general, se suelen vender en MWh y cada hora suele ofrecerse una cantidad diferente. No gastamos la misma cantidad de energía por la mañana que de madrugada. Dicho esto, metidos de lleno en el mundo de las subastas de energía, cada día se ofertan las siguientes tecnologías:

  • Carbón
  • Ciclo combinado: gas y vapor
  • Eólica
  • Solar: fotovoltaica y térmica
  • Nuclear
  • Hidráulica
  • Cogeneración y Residuos (biomasa)
  • Energía importada

¿Qué significa que las subastas de energía sean marginalistas?

El precio que se fija diariamente en las subastas de energía está sometido a un sistema marginalista. Es decir, el precio final lo determinará el valor de la última tecnología necesaria para cubrir el cupo de energía demandada por las comercializadoras. Tranquilo, no te preocupes, vamos a explicarte esto con otras palabras para que lo entiendas mejor. ¡Vamos allá!

Como hemos visto anteriormente, en todas las subastas de energía se determina una cantidad de electricidad que deberá ser repartida para cada hora del día siguiente. Por otra parte, los generadores ofrecerán está cantidad pactada, mediante el uso de diferentes tecnologías para su producción. Así pues, podemos encontrar las comentadas en preguntas anteriores: fotovoltaica, hidráulica, nuclear, etc.

Como es natural, el coste para producir la energía no es el mismo dependiendo de la tecnología que estemos utilizando. Con ello, nos referimos a que no es lo mismo producir mediante energías renovables, que generar energía mediante carbón o ciclos combinados. En el primer caso, utilizamos una materia prima gratuita e ilimitada y, en el segundo caso, necesitaremos adquirir el carbón y pagar sus derechos de emisión o, en el otro caso, costear los peajes de circulación del gas.

Bien, pero pongamos un ejemplo. Imaginemos que necesitamos adquirir 30.000 MWh para una hora determinada. En este momento, empezará a entrar la energía producida por las diferentes tecnologías de más barata a más cara. Primero, se ofrecerán 5.000 MW de nuclear, luego 10.000 de solar y después 10.000 de eólica. Ya llevamos 25.000 MW.

Si lo pactado hubiera sido 25.000 MWh, estaríamos hablando de un precio muy bajo, pues hemos llegado a esa cantidad con energías con un coste muy bajo. El problema es que no hemos llegado y necesitamos 5.000 MW procedentes de ciclos combinados, una tecnología mucho más costosa.

Al final, no nos queda otro remedio que adquirir esos 5.000 MW de energía de ciclos combinados. A partir de ese momento, el precio de toda la energía de esa hora, pasa a valer el coste de producción de los ciclos combinados. Pasando, por ejemplo, de los 15€ a 60-70€ el MWh. Este es un ejemplo muy práctico para entender el funcionamiento diario de las subastas de energía.

¿Qué papel tiene OMIE dentro de las subastas de energía?

Todo este proceso no tendría sentido sin OMIE, el organismo que regula y vigila las subastas de energía. Estas siglas corresponden al Operador del Mercado Ibérico de la Energía. En definitiva, es una organización que ejerce su papel, tanto en el mercado eléctrico de España como de Portugal.

Además, entre otras funciones de OMIE, encontramos la de crear un sistema energético transparente e independiente. Es indispensable que el consumidor o cualquier agente de mercado conozca cualquier detalle que afecte a su factura o su necesaria compra de energía. De otra forma, las especulaciones y las irregularidades estarían a la orden del día.

¿Qué está ocurriendo en la actualidad con las subastas de energía?

Actualmente, estamos viendo cómo las subastas de energía copan las portadas de la gran mayoría de medios de comunicación. Nos encontramos en un momento jamás visto en el sector. El cambio de tarifas establecido este mismo junio, unido al encarecimiento de materias primas como el gas o el carbón y sus altos derechos de emisión, está provocando un caos diario dentro del mercado.

Lejos de acabar esta tensa situación, el Gobierno ha decretado un nuevo paquete de medidas para abaratar el precio de la luz a los consumidores. Esto no ha sido bien visto por las grandes eléctricas, quienes, en parte, ven innecesarias todas las propuestas. Así pues, lo único que ha quedado claro es la tensión y el tira y afloja entre una parte y otra. Mientras, el consumidor final y las pequeñas comercializadoras son los claros afectados en este tema.

Conclusiones

Las subastas de energía son un proceso clave en la fijación del precio diario de la energía en el mercado eléctrico. Con ellas, se pone el precio que comercializadoras y agentes de mercado pagarán por la energía acordada para todas las horas del día. Asimismo, en estas subastas, entran en juego varias tecnologías con costes de generación muy variados.

El precio final se fija mediante un sistema marginalista, estableciendo el resultado final en función de la última tecnología necesaria para cubrir toda la energía demandada en las subastas de energía. Así pues, si sumamos un alto coste de materias primas, así como unos altos derechos de emisión, ocurre la situación de alta tensión que estamos viviendo en estos momentos. Tristemente, al final, lo único que nos queda a los consumidores es esperar y aguantar a que las aguas se calmen.